Entrevista a Francisca Vargas: Migración y seguridad: lo que dicen los datos y lo que muestra el discurso público

“La manera en la que se trata la migración hoy en día es como si toda la migración fuera voluntaria. Esto suena bonito decir ‘sabemos que hay migración forzada’ pero, en buen chileno, cuando toca la aplicación de la ley, la tasa de reconocimiento de las personas refugiadas en Chile es muy baja, estamos hablando del 3,2%. Y es más baja aún si miramos, por ejemplo, a personas venezolanas. Tenemos una figura que se llama protección complementaria, que ha sido sumamente infraaplicada, y visas humanitarias que muchos funcionarios públicos ni siquiera saben que existen.

“Entonces, en el discurso o incluso en la norma existen posibilidades, pero eso no implica que en la práctica ocurran. Hoy estamos viendo la migración como si fuera voluntaria y desde una lógica individualista de cada Estado. Chile, y también Perú, falla cuando permite que discursos electorales fuercen a tantas personas a salir por miedo, sin una respuesta más ordenada, clara y con cooperación internacional”.

“A propósito de algunos delitos nuevos en Chile, que es cierto que existen, se ha vinculado muy fácilmente migración con seguridad. Pero eso es muy distinto a la cantidad. Que haya delitos nuevos no significa que la mayoría los cometa población migrante. Si uno mira la tasa de personas condenadas en Chile, del total, más o menos el 5,3% son personas migrantes; y si lo comparas con el 8,8% de población migrante, significa que hay una subrepresentación”.